jueves, 16 de abril de 2009

!!! QUE TIEMPOS...QUE JUEGOS !!!



No había más sitio, aquel lugar estaba repleto de antiguos cromos de un álbum que se llamaba “Vida y Color” y en el recreo se cambiaban, a veces algunos tenían más valor y el trueque era por dos o tres…
No había más sitio para guardar las estampillas que entre el envoltorio y el papel de plata del chocolate “ Hueso” se acumulaban como un fajo de billetes sujeto con una goma con las que se sujetaba la tapa a la caja de zapatos… hablando de zapatos había unos que se llamaban “Gorilas” y que de regalo traían una pelota de goma, verde, maciza, del tamaño de las de tenis, y que al ser maciza botaban por encima del tejado.
No había más sitio, las canicas de cristal rozaban unas contra otras, el repeón y su cuerda, de guita gorda y su chapa de platillo de “Mirinda” aplastado que impedía que la cuerda se escapase por entre los dedos cuando el repeón se lanzaba dentro de un circulo dibujado con tiza en el cemento de la calle… allí giraba y giraba intentando sacar del circulo a los repeones que los demás habían lanzado antes y que permanecían como dormidos, a la espera de ser rescatados por sus dueños o ser ganados por el dueño del repeón danzarín capaz de sacarlo de aquella especie de cárcel.
No había más sitio… el regaliz negro y duro a penas dejaba sitio a las bolitas de anís.
No había más sitio… los babis de mi colegio solo tenían dos bolsillos.