domingo, 2 de agosto de 2009

EFESO / KUSADASI




Lavisita a Éfeso estuvo marcada por las altas temperaturas, más de 40º y una humedad que emparejada al calor dejan en el cuerpo una sensación de sopor casi insoportable. Esta circunstancia marcó el ritmo del grupo, haciendo que todo se desarrollase como con prisas, lástima porque seguro que se nos quedaron mil detalles que no pudimos observar.


Salimos del puerto en un autobús que nos llevó hasta la casa donde según cuenta la tradición, vivió la Virgen María con San Juan cuando viajaron a Efeso y que fue encontrada en 1820; en aquel momento sólo permanecían en pie sus muros. Se piensa que estas eran las ruinas donde se encontraba la Iglesia dedicada a la Virgen María datada del siglo IX y cuya estructura es de origen bizantino. Esta casa ha sido reconocida por el Vaticano como reliquia y fue visitada en 1967 por el Papa Pablo VI y en 1979 por el Papa Juan Pablo II.


Tras la visita a este lugar mariano, dónde sorprende la cantidad de autobuses y taxis que desplazan a los innumerables turistas/peregrinos, nos dirigimos a Efeso, una de las metrópolis Greco-Romana más importante de la antigüedad, fue fundada sobre el Mar Egeo en el año 1000 AC. Al llegar aquí, comenzaremos nuestra visita caminando por el sitio arqueológico donde entraremos por la puerta de Magnesia y acompañados por nuestra guía recorrimos sus calles pavimentadas en mármol, quedamos impresionados por los numerosos monumentos, templos, ágoras, pórticos y fuentes del periodo romano. Visitamos el Odeón, la Biblioteca de Celso,la segunda en importancia después de la Biblioteca de Alejandría y que fue construida en el siglo II en honor al Cónsul Celso Polemeanus, el Templo de Adriano y la Fuente de Trajano.


Finalizamos esta visita con el Gran Teatro, cuya construcción comenzó durante el reinado delEmperador Claudio y finalizó medio siglo después, tiene un particular interés por su maravillosa acústica y capacidad para más de 25.000 espectadores, hoy todavía se realizan en él conciertos y representaciones.


La guía, quiso hacernos un obsequio y nos condujo hasta la Iglesia de San Juan, construida con piedras del templo de Artemisa, una de las maravillas antiguas de la humanidad, de este templo solo queda una columna, en medio de un huerto y coronada por un nido de cigüeñas… las demás columnas están en el museo británico…!Como no!..... ¡menos mal!.

Una vez finalizada la visita nos dirigiremos a una de las fábricas de pieles más reconocidas de Kusadasi, donde asistimos a un desfile y donde nos obsequiaron con un té típico de Turquía. Tras esta parada y de regreso al puerto tuvimos la oportunidad de visitar la zona comercial del puerto y de las calles cercanas, un entramado de calles donde el comercio es importante, y se pueden hacer compras de productos típicos y de recuerdos… eso sí, siempre que sepas regatear…curiosa costumbre del arte del comercio.

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