Imposible
conseguir hoy mis 21 gramos de felicidad, ya sé, es poco pero no
pido más, justo lo que pesa el alma, ni gramo más ni gramo menos. Y
mira que lo intenté, hasta dibujé diques de sumisión en mis
pensamientos. Imposible desaguar un diluvio por el sumidero del
patio... Siempre hace remolinos y se escapaba para otros lados.
Ni
siguiendo tus consejos consigo serme fiel, y mi sombra se escapa
escalando el blanco de la pared donde deja de ser ella para ser yo.
Yo... ¡Que poco recipiente para contener un abandono tan grande! Sí,
seguí tu consejo y aprendí a distinguir quien sí y quien no sabe
mirar mis cuadros. En mi museo imaginario, el vigilante y yo, los dos
solos, él dando un toque con su dedo índice en el marco del cuadro
que le parece que está torcido, jugando a ser Dios que pone orden en
el desorden y desorden en el caos... Dios es sabio y hasta
misericordioso, me sorprende negándome hoy mis 21 gramos de
felicidad, será que no le he sentido, que no he notado su
presencia ni oído su llave girando en la cerradura de mi puerta.
Es, unas veces a media noche, otras al amanecer, o en el momento que
menos lo espera, cuando sin hacer ruido llega como el agua del
diluvio al que antes me refería. Estoy a punto de conseguir una
tregua de sueño, pero me asalta la idea aterradora de que tal vez
llame a mi puerta porque dejó olvidada su llave colgada en cualquier
percha o, sin querer, la perdió por la calle cuando juega con los
ángeles a la villarda, a los bolindres, o a las tabas... Mi vigilia
ondea como bandera de paz. El visillo se infla de aire de brisa de
madrugada... el sueño, como el agua, siempre hace remolinos y se
escapa para otros lados... esta noche no me dejó ni 21 gramos de
calma.
(hay una canción que se titula "21 GRAMOS", su autor e interprete es REVOLVER,,, merece la pena escucharla)
(hay una canción que se titula "21 GRAMOS", su autor e interprete es REVOLVER,,, merece la pena escucharla)